El texto da cuenta de la controvertida relación, que pareciera indisoluble, entre el decir y el ver. ¿Qué ven los sujetos al enfrentarse a una obra pictórica?, ¿cómo acceder al ver de un público si no a través de su decir? Para llegar al decir sobre el ver de una población determinada, la autora nos sumerge en una discusión que ha enfrentado a teóricos de diferentes escuelas. Los términos del problema son planteados alrededor de la percepción y de la recepción plástica, haciendo evidente las mediaciones que se producen entre el sujeto y la imagen. Tres imágenes pictóricas: Nuestros antepasados. La ofrenda: nuestros dioses de Herrán; Tata Jesucristo de Goitia, y Cortés y la Malinche de Orozco son expuestas a la medida de un público previamente seleccionado para analizar estas discursividades desde una perspectiva de género y de grupos socioeconómicos.