Los libros de Nathalie Heinich, Lo que el arte aporta a la sociología (2001) y La sociología del arte (2003) están íntimamente relacionados. En las páginas finales de este último título la autora afirma: “Las propuestas que siguen provienen menos de una comprobación que de una toma de posición con respecto a la práctica de la sociología, formulada en un momento —comienzos del siglo XXI— en el que está dividida en muchas escuelas”. Es notable la densidad teórica y epistemológica que puede alcanzar la autora en tan pocas páginas (202 si uniéramos los dos trabajos), por lo que no se trata de obras de divulgación sino enfocadas a quienes tienen conocimientos previos de la sociología y del arte. En este ensayo se comentan las ideas principales de Heinich, tomadas de uno y otro libro.